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Carrito

El día que dejé de ser víctima

Sin duda tuve una infancia feliz, una adolescencia bastante rebelde y una juventud vivida al máximo. Fue cuando fui adulta que me convertí en una más…una mujer más que “sufría” por ser mujer, por ser incomprendida, porque se sentía sola, porque nadie me ayudaba y mil cosas más.